- Editorial:
- PAIDÓS
- Any d'edició:
- 2015
- Matèria
- No ficció
- ISBN:
- 978-84-493-3160-2
- Pàgines:
- 336
- Enquadernació:
- Rústica
- Col·lecció:
- Divulgación-Autoayuda
EL CEREBRO FELIZ
APRENDE A UTILIZAR LAS HERRAMIENTAS QUE HAY EN TI
Mila Cahue
La felicidad es una combinación perfecta de emoción y razón; cada una tiene sus herramientas: la parte emocional, relacionada con la ira, la tristeza, el miedo, la alegría y el amor, y la parte racional, que atañe a la atención, la percepción, la memoria y la intuición. Sin embargo, si no las conoces y utilizas ambas partes adecuadamente, el equilibrio es imposible, por lo que te sentirás insatisfecho.Mila Cahue nos explica en este libro cómo alcanzar esa combinación perfecta de emoción y razón con una fundamentación sencilla: aprender a pensar bien es como aprender a conducir; si controlas aquello en lo que fi jas tu atención, podrás controlar tu visión de la realidad. Las emociones, a su vez, actúan como señales de tráfico que te indican en cada contexto cuándo hay que parar, corregir la ruta o soltar el lastre. En todos los casos, la razón se ve condicionada por la gestión de las emociones y, por lo tanto, necesitas aprender a redirigir tus emociones para actuar de forma adecuada.
La felicidad es una combinación perfecta de emoción y razón; cada una tiene sus herramientas: la parte emocional, relacionada con la ira, la tristeza, el miedo, la alegría y el amor, y la parte racional, que atañe a la atención, la percepción, la memoria y la intuición. Sin embargo, si no las conoces y utilizas ambas partes adecuadamente, el equilibrio es imposible, por lo que te sentirás insatisfecho.
Mila Cahue nos explica en este libro cómo alcanzar esa combinación perfecta de emoción y razón con una fundamentación sencilla: aprender a pensar bien es como aprender a conducir; si controlas aquello en lo que fi jas tu atención, podrás controlar tu visión de la realidad. Las emociones, a su vez, actúan como señales de tráfico que te indican en cada contexto cuándo hay que parar, corregir la ruta o soltar el lastre. En todos los casos, la razón se ve condicionada por la gestión de las emociones y, por lo tanto, necesitas aprender a redirigir tus emociones para actuar de forma adecuada.